El Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) ha trasmitido un mensaje de calma a los mercados para detener las crecientes especulaciones en torno a una subida de tipos. La mejoría económica y, sobre todo, una inesperada aceleración de la reducción del paro, habían generado una fiebre de especulaciones que, en los casos más extremos, apuntaban a este mismo año.